El 20 de septiembre, millones de personas alrededor del todo el mundo, participaron en la huelga climática.
Estudiantes, profesores, y la comunidad de la Universidad Estatal de San Diego, también formaron parte de esta protesta.
Los protestantes se reunieron enfrente del edificio Hepner Hall a las 11:30 a.m. para después marchar al Student Union con la intención de abogar y hacer cambios para el medio ambiente.
Los estudiantes de SDSU están pidiendo cambios a la administración de la universidad porque no están actuando lo suficientemente rápido sobre las acciones climáticas que se requieren.
Asimismo, los universitarios exigieron que el Green New Deal de SDSU, logre la neutralidad del carbono para el año 2030 y también que se establezca un puesto de director de sostenibilidad en la oficina de la presidenta para promover el clima como una prioridad.
“Hay cosas que estamos promoviendo y el cambio climático no es una de ellos pero debería serlo”, mencionó Valeria Montes, estudiante de primer año de bioquímica. “Espero que los políticos vean que hay caos sucediendo porque no están actuando para un cambio”.
La marcha finalizó en el Student Union, donde los oradores invitados fueron Sarah Jacobs, Sarah McPride y Taylor Campbell Mosley, quienes hablaron sobre los cambios que no solo SDSU necesita hacer, sino también los cambios que se deben de hacer para proteger nuestra planeta.
“Ahorita no es ningún secreto que estamos en una crisis global”, dijo Joaquín Vásquez, postulado para la cámara de representantes de EEUU. “Nuestro mundo literalmente se está quemando y los políticos de Washington no están poniendo atención”.
Vásquez dijo que vino a apoyar a la comunidad de SDSU en esta huelga para pedirle al estado de Washington que tome acción para cuidar el medio ambiente y revertir el impacto de la crisis climática.
Muchos de los que participaron en la protesta no solo eran estudiantes o profesores de SDSU, sino también activistas que se unieron para luchar por un cambio inmediato para la protección del planeta.
“Me preocupa que la tierra que vamos a dejar para nuestros hijos y nietos no será sustentable al ritmo que vamos”, expresó Susan Grant Lee, graduada de SDSU. “Espero que esto despierte a la gente que tal vez no crea en la ciencia detrás de ella. El 98% de los científicos creen que el cambio climático no es una teoría de conspiración y está sucediendo ahora”.
La mayoría de los que formaron parte del evento llevaron carteles y corearon para mostrar su apoyo.
La protesta pacífica duró alrededor de una hora y concluyó con un discurso de Sarah McPride.
McPride dijo que el costo de la inacción es demasiado alto.
“Sólo tenemos un planeta y esto es global”, señaló Cassie Weinberg, estudiante de negocios y sostenibilidad. “La gente está arruinando el planeta, tenemos que actuar juntos y hacerlo ahora porque el IPCC reclamó un informe de que solo quedan 12 años hasta que agotemos nuestros recursos”.
Diane López es estudiante de último año de comunicación. Síguela en Twitter @dianelopezolea.
