Lizeth Acevedo Cano, estudiante de desarrollo infantil nació en Mexicali y vino a los Estados Unidos cuando tenia ocho meses.
Ahora ella tiene 20 años y es una estudiante indocumentada de San Diego State University.
Ella dijo que su corazón se quebro cuando vio que fue elegido presidente Donald Trump el 8 de Nov.
Durante su campaña, Trump dijo que sus políticas incluirían deportar inmigrantes indocumentados con registro criminal y construir un muro a lo largo de la frontera de México.
Daniela Marquina Cuevas, estudiante de cuarto año y indocumentada, dijo que durante la elección ella trato de ser optimista.
“Me sentí triste y confundida al principio porque casi toda mi familia es indocumentada así que mi primer pensamiento fue lo que va a pasar a mi mamá y papá”, Marquina Cuevas dijo. “Después comencé a pensar qué pasaría con todo el trabajo duro que he dedicado a la escuela”?
Cano dijo que ella no podia creer que Trump ganó la elección y no sabía cómo explicarles a sus padres que él iba a ser el proximo presidente.
Ella dijo que lloró la noche de la elección porque como una estudiante indocumentada su vida en general es difícil pero ahora que Trump ganó la presidencia ella sabe que va a tener mas obstaculos.
“Me sentí traicionada, pensé que el país en el que vivía no permitiría que alguien como él llegara hasta aquí, pero estaba equivocada”, dijo Cano. “Incluso ahora estoy todavía en la incredulidad y preocupado por lo que mi futuro podría parecer, o si aún tengo un futuro aquí”.
Su miedo de no poder terminar la escuela y de ser deportada en escuela cambió un poco cuando el rector de California State University anunció que el sistema CSU no iba ayudar el gobierno a deportar sus estudiantes indocumentados.
El Rector, Timothy P. White, dijo esto en la Reunión del Consejo de Administración el martes 16 de noviembre.
“Somos una universidad que se enorgullece de la inclusión. Cualquier cosa que disminuya a un miembro de nuestra comunidad nos disminuye a todos”, dijo White en un correo electrónico enviado a CSU el 17 de noviembre.
Cano dijo que es bueno que White dijo que no iba a deportar estudiantes indocumentados pero ella todavía tiene inseguridad en su futuro por que no está garantizado su permiso por el nuevo presidente.
Marquina Cuevas dijo que la promesa del CSU es un alivio, pero es sólo el primer paso.
Emilio Ulloa, director del Programa de Igualdad de Oportunidades (EOP), dijo que es bueno que la CSU pueda hacer la promesa de no deportar a estudiantes indocumentados en sus campus.
“Nuestra misión es educar y proveer un ambiente seguro y acogedor, libre de la amenaza de cualquier forma de persecución es crítico para esa misión”, dijo Ulloa. “Me parece que sólo hay ganancias por educar a quien queramos. Esas ganancias son de naturaleza social, disfrutadas por todos y de gran alcance “.
Cano dijo que como una estudiante indocumentada ella ha pasado por muchas decepciones.
Ella dijo que cuando estaba en bachillerato una maestra anunció una oportunidad para una beca.
Ella cumplio con todos los requisitos, tenía altas calificaciones, estaba involucrado en el campus, y estaba en la lista de honor cada año. Cuando ella le pregunto a su maestra por más informacion se dio cuenta que no podia aplicar porque no nacio en los Estados Unidos.
“Me sentí tan avergonzada por pensar por un segundo que era como todos los demás, me recordó muy rápido de que no tengo los privilegios de los demás”, dijo Cano. “Casi lloré en clase porque sentí que era tan injusto, aquí estoy haciendo todo bien, tengo las calificaciones y no puedo aplicar a una beca porque no nací aquí. Me sentí desanimado y sentí que mi trabajo duro era todo por nada”.
Ella también dijo que está triste que no puede participar en programas de estudio en el extranjero.
“Definitivamente me hace sentir como si me falta tanto de la vida en algunos aspectos”, dijo Cano.
Aunque ella tenido que sobrepasar muchos obstáculos, ella dice que está orgullosa de decir que es la primera persona en su familia de graduarse de bachillerato y de ir a la universidad.
“He tenido que trabajar dos veces más para llegar a donde estoy ahora”, Cano dijo. “Y para las personas que no creen en los inmigrantes que tienen éxito, la prueba de que están equivocados, estará allí cuando me pongo mi gorra y vestido sosteniendo mi Diploma y haciendo que mi familia esté orgullosa”.
Las dos estudiantes indocumentadas dieron permiso a The Daily Aztec para usar sus nombres.