El 9 de noviembre, “Lizzy and Me”, un evento que permite a estudiantes pasar y donar suéteres que pueden ser tomados por otros estudiantes o personas en necesidad a la Casa Agape, tomó parte en San Diego State.

Jeanette Corona, estudiante de quinto año de estudios chicanos, organizó el evento. Ella dijo que se le ocurrió un donativo de sueteres porque desde el principio del semestre, ha querido ayudar a la comunidad estudiantil, ya que ella pasó por un tiempo en el que no tenía donde vivir.

“Especialmente ahora que está más frío. Es otoño”, dijo Corona. “Pensé ‘que hay de las personas sin hogar, las personas que están en las calles, no querrán un suéter”.

El donativo de sueteres también ayudará a víctimas de abuso en Tijuana, pero ahora, Corona solo quiere conseguir mas sueteres y ayudar a quienes estén cerca que los ocupen, ella dijo.

“No rechazamos a nadie”, dijo Corona. “Si necesitas un suéter, ven y toma uno”.

Un reto es el hacer que personas en necesidad que están cerca del campus sepan que pueden ir a la Casa Agape y tomar un suéter, dijo Corona.

“Me gustaría saber cómo hacerlos venir”, dijo ella. “Me gustaría saber qué debo hacer para poder decir ‘hey ven a la Casa Agape’ y que sea más acogedor para que ellos entren”.

Corona planeó y organizó este donativo ella sola, aun que corre la voz con sus miembros en la Asociación de Activistas Chicanos.

“Y no es que quiera ser como Jesús”, dijo Corona. “Soy yo tratando de ser más humana y hacer una conexión con personas de todas partes”.

El nombre del donativo, “Lizzy and Me” viene de un libro que Corona leyó y con el que se identificó.
“Cuando lo leí, me vi en un hoyo, un foso y de allí, me inspiré”, dijo ella. “Leer ese libro me dio esperanza que hay personas a mi alrededor que me pueden ayudar”.

Corona dijo que con este donativo, ella quiere que estudiantes se den cuenta que hay muchas personas sin necesidades básicas como ropa.

“Esa fue la meta de hoy, humanizar, ver lo que la gente está viviendo en verdad”, dijo Corona “No tenemos vidas unidimensionales. Somos humanos, somos complejos”.

Maricruz Carrillo, estudiante de maestría de segundo año en bioingeniería, asistió al donativo.
Carrillo es miembra de la junta de A.Ch.A, y allí, conoció a Corona.

“Cuando puedes donar, por ejemplo un suéter, te da este ‘ok, alguien lo va a usar’, un buen sentimiento al hacerlo”, ella dijo.

Carrillo dijo que es importante que estudiantes se den cuenta que hay otros estudiantes con necesidades.
“A veces, nos enfocamos tanto en nuestros estudios y solo en hacer cosas de la carrera que olvidamos que más cosas pasan”, dijo Carrillo.

Amanda Sorourbakhsh, estudiante de maestría en asesoramiento, dijo que es importante que estudiantes participen en donaciones y que se ayuden entre si mismos.

“Aunque vaya de regreso a estudantes, a la comunidad o a otro pais como México, los saca de su realidad y que pueden hacer algo más en el mundo”, dijo ella.

Dijo que aunque no sabe quién usará los sueteres, la intention de querer ayudar a quien los necesitan es lo que cuenta.