“Ni una muerte más! Ni una muerte más!” es lo que escuchaban los peatones al cruzar de Tijuana a San Ysidro el sábado pasado.

Bajo la lluvia y con pancartas en mano, activistas, estudiantes y hasta veteranos se reunieron en la garita de San Ysidro para manifestarse en contra de la Patrulla Fronteriza.

Berta Gutiérrez—la organizadora—conto con el apoyo de aproximadamente 25 organizaciones. Entre ellas estaban Ángeles de la Frontera y el Movimiento Estudiantil Chicano de Aztlán (MEChA).

El motivo de la manifestación fue denunciar la brutalidad por parte de la Patrulla Fronteriza hacia inmigrantes.

“Esta protesta fue planeada desde el año pasado…porque todavía no hay respuestas para las familias que han sido victimizadas (y) que ya no tienen a sus seres queridos” explicó Gutiérrez.

“Es hora que ya nos den cuentas de lo que ha pasado y queremos también ya que sigan un proceso de transparencia y que no vuelva a pasar esto.”

Entre los manifestantes estaba la madre de Anastasio Hernández Rojas, un hombre que murió en manos de oficiales fronterizos en el 2010. María de la Luz Rojas expresó su indignación por el tratamiento hacia los migrantes el Estados Unidos.

“Yo veo en este país que no están haciendo valer los derecho, no hay derechos humanos…el nombre que le pondría seria inhumanos” dijo Rojas.

La comunidad estudiantil de San Diego también estuvo presente en la garita. Estudiantes—no solo hispanos—alzaron la voz y hasta opinaron sobre el entrenamiento que deberían recibir los oficiales al entrar a la Patrulla Fronteriza.

“Podemos decir que tengan más programas para que ellos entiendan que no es necesario responder con tanta violencia” comentó una estudiante de la Universidad de California en San Diego que prefirió ocultar su identidad.

La joven agregó —similar a como Salvador Allende lo dijo—que estudiantes deberían apoyar a causas como esta porque “ser estudiante y no ser revolucionario es una gran contradicción”.

Jesús Méndez Carbajal, un estudiante de la Universidad Estatal de San Diego (SDSU), también asistió y comentó que es importante recordar y pedir justicia por los actos de los oficiales hacia los migrante.

“Las muerte de nuestros compañeros y nuestras compañeras no son cosas que se olvidan. No son cosas que se pueden borrar…aquí seguiremos hasta que la justicia llegue para todos nosotros”  exclamó Méndez Carbajal.

Méndez Carbajal insistió en la importancia de crear conciencia entre la comunidad universitaria, no solo a nivel estudiantil sino también al nivel administrativo. Dijo que es necesario que las universidades toquen temas—como la agresión hacia personas indocumentadas—que afectan a gran parte de su alumnado.

Dos cosas que fueron visibles en esta protesta fue la demanda de justicia y un trato más humano hacia inmigrantes.

La madre de Anastasio Hernández  declaró sentir que en Estados Unidos no existe la justicia para mexicanos y agregó que a pesar de tener pasaportes diferentes, todos somos iguales.

“Los de Estados Unidos como los mexicanos tienen la misma vida y tienen lo mismo en su cuerpo.”

Foto cortesia de Lourdes Valdez