El premio de Trustee Emeritus Ali C. Razi por logros destacados es la beca más prestigiosa en el sistema educativo de California State University, y solamente es premiado a uno de 23 estudiantes. Alejandro Arias, estudiante de SDSU, fue elegido.
Alejandro Arias nació y creció en Fallbrook en San Diego, y es el quinto hijo de siete en su familia. También es el primero en asistir la universidad.
“Creciendo, nunca me imaginé que iba estar en la universidad”, dijo Arias. “Era algo que miras en las películas. Mis amigos y yo nunca habíamos pensado en eso”.
Fue en su último año de la escuela secundaria que Arias empezó a informarse del colegio comunitario.
Arias se inscribió al colegio de Palomar. Pero aún, no sabía qué era lo que quería estudiar, y empezó a experimentar.
“Me metí en clases de cómo hacer bombero”, dijo Arias. “Me metí en clases de negocios y luego en clases de nutrición”.
Fue en sus clases de nutrición que encontró su lugar, y decidió especializarse en comida y nutrición.
Todo para Arias iba en el camino correcto cuando a mitad del semestre, su familia recibió malas noticias. Su mamá fue diagnosticada con cáncer.
“Me sentí responsable en la forma del apoyo de la familia”, dijo Arias.
Arias decidió salirse de la escuela, y empezó a trabajar tiempo completo para ayudar a sus papás y a su familia y para también pasar más tiempo con su mamá.
“Fue un momento triste, pero a la misma vez, cuando pasa este tipo de cosas, las familias se unen más”, dijo Arias. “Eso nos pasó, y tuvimos más oportunidades de conectar y platiqué con mi mamá de cosas que nunca había hablado antes”.
Cuando su mamá se empezó a mejorar, Arias decidió continuar con sus estudios.
“Estaba trabajando muchas horas, y dije que yo no quería esta vida”, dijo Arias.
Arias dijo que veía a sus hermanos mayores, y no quería sentirse como que el trabajo que tenía ahorita era su única opción. Él quería algo más.
Cuando regresó a la escuela llegó más abierto y fue cuando empezó a buscar los recursos posibles para transferirse a la universidad.
“Cuando regresé, conocí a una maestra quien me ayudó trasladar a la universidad”, dijo Arias.
Arias fue aceptado a muchas universtidades, pero para él, SDSU fue su escuela preferido.
“Cuando vi que fui aceptado a SDSU, fue unos de los días más felices de mi vida”, dijo Arias. “Esta era la universidad de mis sueños”.
Arias empezó a involucrarse en programas y organizaciones en su primer semestre en SDSU.
En su segunda semana, se topó con Marissa Vásquez, profesora asistente de liderazgo colegio de la comunidad.
Ella fue quien lo aceptó en el Programa de Becas de Investigación Azteca.
“Ha sido unas de las mejores cosas que he hecho y unas de las mejores oportunidades que he tenido”, dijo Arias. “Este programa me ha abierto las puertas aquí en SDSU”.
Arias siguió involucrado en campus con programas como ser mentor para estudiantes en el programa de Éxito, Oportunidad, Académicos, y relación y ser miembro de Traslado Alianza de Alcance Estudiantil, quien apoya a estudiantes que se han trasladado de un colegio comunitario.
También está involucrado en la Organización Estudiantil de Nutrición. Allí fue cuando ayudó publicar un libro de recetas.
Arias dijo que cuando aplicó para las becas del sistema educativo de CSU, nunca pensó que iba ganar unas de las más prestigiosas becas que CSU ofrece.
“Yo siento que no la busqué, me encontró”, dijo Arias. “Y solo fue por echarle ganas porque no soy un estudiante excelente, yo soy como los demás”.
La beca de Trustee Emeritus Ali C. Razi dada por logros destacados es premiada con $12.000. Fue nombrada por Ali Razi, un joven quien tuvo que rehacer su vida en Los Ángeles después de huir de Irán con su esposa e hijos en 1979.
Arias planea graduarse y recibir su bachillerato en la primavera del 2018. Después, quiere obtener su maestría en consejería para ayudar a estudiantes.