En Logan Avenue, empezando en Chicano Park, tomó lugar el octavo festival anual Fiestas Del Sol San Diego, y en plena espera por una reforma migratoria – entre música, juegos y puestos de comida y aguas frescas – decenas de organizaciones y recursos para inmigrantes aprovecharon de esta ocasión para conocer, platicar y tratar de educar a la gente de esta comunidad acerca de sus derechos.
Como parte de su práctica profesional con la organización Ángeles de la Frontera, Elizabeth Carazolez, estudiante de seguridad internacional y resolución de conflictos en San Diego State, acudió al evento para informar a la comunidad, pero también para juntar firmas y peticiones por una reforma migratoria justa.
Ángeles de la Frontera es una organización fundada por el ex-alumno de SDSU Enrique Morones, y es principalmente conocida por llevarle agua a aquellos inmigrantes que cruzan a EE.UU. por el desierto en el este de California.
“Estamos aquí para contarle a la gente lo que hacemos y compartir nuestra organización con ellos”, dijo Carazolez. “También queremos que la gente se una a nuestra organización y actividades pues necesitamos voluntarios”.
La organización sin fines de lucro se fundó en 1986, cuando aún no tenían el nombre con el que, según Morones, los bautizó Don Francisco en su programa Sábado Gigante al presentarlo frente a su público como el ángel de la frontera.
“Empezamos antes de que construyeran el muro acá …. cuando había uno o dos muertos por mes, no uno o dos cada día”, dijo Morones.
Segun Morones, otra de las razones por su asistencia es prevenir que inmigrantes caigan en fraudes, pues ya han habido varios casos en los que les piden dinero asegurando acceso rápido a la ciudadanía a través de una reforma migratoria que aún no existe.
“Esta comunidad de clase obrera se confía mucho y por eso es que cae en estos engaños”, dijo Morones.
Todos los martes a partir de las 6 p.m. los Ángeles de la Frontera proveen asistencia jurídica gratuita a inmigrantes en el Centro Comunitario Sherman en Island Avenue.
A lado de la organización de Morones, estaba el local de la Unión por las Libertades Civiles Americanas o ACLU con panfletos informando desde qué hacer y cómo comportarse si son parados por la policía, a qué principios de la reforma migratoria les favorecen y cuáles podrían ser no muy de su agrado.
“Definitivamente queremos más derechos para más gente …. Si, queremos una reforma en el paso a la ciudadanía, pero no por eso queremos un refuerzo en seguridad fronteriza que convertiría estas áreas en zonas militares”, dijo Beatriz García, directora organizativa del ACLU en San Diego y el Valle Imperial. “Hay muchas cosas divertidas en el festival, pero también aquí la gente tiene acceso a información en su lenguaje desde su propia colonia”.
Fuera del área educacional, varios pintores locales presentaron sus obras a los asistentes, mientras diferentes bandas le tocaron su material al público.
“Si tienen hijos que les gusta la música, hay que apoyarlos”, le dijo Jenny Bello, conductora del evento, a los espectadores de la banda The Plebes. “Es preferible que estén en una banda musical a que estén en una banda de cholos”.