Normalmente en Estados Unidos los centros de YMCA son conocidos como áreas de recreación o facilidades en donde menores de edad pueden ir después de escuela a involucrarse en actividades deportivas.
Mientras esta es una de sus funciones a través del mundo los centros de YMCA, por lo menos en la ciudad de Tijuana, son áreas de refugio para jóvenes migrantes.
La casa YMCA para menores ubicada en Tijuana, lleva 27 años operando, en donde han atendido aproximadamente 60,000 jóvenes a lo largo de su existencia.
El mayor enfoque de esta instalación es recibir a repatriados mexicanos. Un repatriado es una persona que regresa a su país de origen y en muchos casos cuando un repatriado mexicano regresa a México, es debido a que fue deportado de los EE.UU.
Esta instalación da refugio a los repatriados y al mismo tiempo les proporciona ayuda a comunicarse y a regresar con su familia en su ciudad de origen dentro del país.
Sin embargo, a esta instalación no solo llegan repatriados mexicanos, sino jóvenes de Centroamérica que están tratando de cruzar hacia EE.UU.
Países centroamericanos como Honduras, El Salvador y Guatemala, también conocidos como los 3 países que forman el Triángulo Norte, son países con altos niveles de violencia.
Las oficinas enfocadas en crimen y drogas por parte de las Naciones Unidas, han reportado niveles altos de homicidio en esta área de Centroamérica, de “4 a 6 veces más altas” que en EE.UU.
La gente que trata de emigrar de estos países lo hace para escapar de la violencia que es constituida mayormente por pandillas o cárteles de droga de esta área.
Las pandillas que habitan el Triángulo Norte son conocidas por su manera siniestra de operar dentro del país. Han ganado su reputación como pandillas peligrosas por llevar a cabo secuestros, asesinatos de menores, violaciones y tráfico de personas.
Ya que estas pandillas controlan varias partes de estos países, la gente está huyendo de sus casas debido a la crisis humanitaria de estos países.
En la casa de migrantes de Tijuana, llegan varios jóvenes originarios de los países del Triángulo Norte que por medio de palabra llegan pidiendo ayuda a ese establecimiento.
Uriel González, coordinador de la casa de migrantes en Tijuana, menciona que aunque la mayoría de los jóvenes que llegan a pasar por este establecimiento son jóvenes repatriados, también llegan varios centroamericanos que tratan de llegar hacia EE.UU.
La mayor razón por la cual escaparon de su país de origen es por el alto riesgo de vida en la cual existe en dichos países. La manera en la que la casa de migrantes beneficia a los jóvenes centroamericanos es aparte de darles un lugar en donde quedarse, les ayuda con el proceso de refugio para poder cruzar hacia los EE.UU.
González dijo que el proceso comienza por asignar a cada joven un abogado el cual evalúa su caso para ver si es posible poder obtener el estatus de refugiado en EE.UU.
Migrantes centroamericanos tiene que comprobar que en realidad están en peligro al estar en su país de origen. Si el caso es aprobado, reciben su permiso de residencia y es otorgado el estatus de refugiado en EE.UU.
El problema que ha estado enfrentando la casa de jóvenes migrantes en estos últimos días ha sido que no ha llegado ni un repatriado o centroamericano a la facilidad.
Uriel dijo que en los 27 años que se lleva operando la casa de migrantes, nunca ha visto algo así.
“La gente no quiere cruzar”, dijo Uriel González, “tiene miedo, aunque no esté pasando nada, simplemente como están presentando las noticias los medios de comunicación, todos los días la figura presidencial de EE.UU. tiene algo que decir en contra del tema migratorio”.
La casa de migrantes no ha recibido a ningún menor por 10 días, Uriel dijo que desde que entró Trump a la presidencia, el porcentaje de jóvenes que llegaban al YMCA disminuyó.
“Para muchos de ellos, el sueño no es como tal, es una oportunidad de vida, sobrevivencia”, dijo Uriel.