El cinco de septiembre del 2017, el Presidente Donald Trump anunció el fin del programa Consideración de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia. Esta medida ejecutiva se estableció por el ex-presidente Barack Obama en el 2012, y desde entonces, hasta 800,000 jóvenes han beneficiado por esta acción ejecutiva. DACA provee a estos jóvenes el poder de estudiar, trabajar y les da protección de ser deportados. Este permiso se puede renovar cada dos años después de pasar una investigación de antecedentes y cumplir con otros requisitos.
El Presidente Trump dijo que el Congreso tendrá hasta el cinco de marzo del 2018 para llegar a un acuerdo para el futuro de estos jóvenes. El 9 de enero, Trump tuvo una reunión con líderes bi-partidistas en la Casa Blanca para discutir el futuro de DACA y la posibilidad de una reforma migratoria.
De acuerdo con el periódico el New York Times, Trump les dijo a los líderes bi-partidistas que no piensa que será tan complicado.
El New York Times publicó que legisladores dijeron que Demócratas y Republicanos se pusieron de acuerdo con cuatro cosas que serán negociados como parte del trato de DACA. Los cuatro son: el destino de los recipientes de DACA, la seguridad de la frontera, inmigración basado en familia y la lotería de visas.
Igual, ese día, el juez federal, William Alsup, ordenó que la administración de Trump mantenga DACA vigente. Esto significa que jóvenes con DACA pueden renovar su permiso de trabajo aunque se les hayan vencido después de la de clausura del cinco de octubre del 2017. Pero hay excepciones.
La primera es que nuevas aplicaciones para DACA no serán procesadas. Solo se aceptará renovaciones. Y la segunda es que no se van a aceptar aplicaciones de libertad condicional anticipadas.
Daniel Ramírez, graduado de SDSU, está optimisto por esta decisión.
“Muchos de mis amigos perdieron su DACA”, dijo Daniel. “Pero, ahorita, estoy feliz que ellos puedan renovar”.
Ramírez quiere ser un abogado de inmigración, pero, para él, DACA no es suficiente.
“Para mí y mi situacion, estoy poquito decepcionado porque a mí, me gustaría la residencia o ciudadanía para poder trabajar en lo que yo estudié”, dijo Ramírez. “Pero, tengo que seguir adelante, y ojala que Donald Trump se ponga de acuerdo con los legisladores para venir a un acuerdo de amnistía”.
El congreso sigue en pláticas con Trump para tratar de crear una nueva legislación para reemplazar a DACA.
Después de otra junta con líderes bi-partidistas sobre DACA y otros programas migratorios el 11 de enero, Trump se expresó de una manera vulgar sobre países africanos y países del caribe diciendo que por qué querían este tipo de personas en los EE.UU., creando un gran espectáculo. Esta reunión fue la última que han tenido.
Trump usó su cuenta de Twitter para agarrar la atención de los Demócratas unos días después.
“Los Demócratas hablan mucho y no actúan”, dijo Trump en el tweet.. “No están haciendo nada para reemplazar a DACA, una gran oportunidad perdida, qué mal”.
Por lo tanto, fundador y director ejecutivo de Amazon y su esposa donaron $33 millones para la organización TheDream.US que provee a “soñadores” o beneficiarios de DACA financiar sus estudios. Esta donación va ayudar por lo menos a 1,000 jóvenes, según la organización. El programa DACA ha tenido el apoyo de muchos fundadores y directores ejecutivos como Mark Zuckerburg de Facebook y Bob Iger de Disney.
A partir del 16 de enero, el departamento de justicia anunció su decisión en apelar ante la corte suprema la decisión del juez Alsup.
“Desafía la ley y el sentido común que el DACA, un programa político enteramente discrecional que fue implementado unilateralmente, que de alguna manera sea hecho obligatorio en todo el país por una sola corte distrital de San Francisco”, dijo el procurador de justicia Jeff Sessions en una declaración.
El futuro de estos jóvenes no está muy claro. El gobierno todavía tiene que aprobar un plan de gastos y no saben si DACA va estar incluido en ese plan.