Por el tercer año consecutivo, se llevó a cabo la Marcha de las Mujeres donde residentes del condado de San Diego protestaron en Waterfront Park.
El evento empezó a las 10 a.m el 19 de enero con música, bailes, comida y la bienvenida a todos los asistentes por Nora Vargas, quien fue la vocera de la marcha.
Este día no solo fue dedicado para los derechos civiles de la mujer, sino para apoyar a todas las comunidades minoritarias, tales como la de LGBT y a los recipientes del programa DACA.
A las 12 p.m., los manifestantes comenzaron a marchar hacia la calle Harbor Drive, después Pacific Highway y terminaron de regreso en el parque.
Nora Vargas, vicepresidenta de relaciones con la comunidad en Planned Parenthood de Pacific Southwest, dijo que la marcha es para que la comunidad sea más fuerte y logre los cambios que todos merecen.
“Estoy marchando con ustedes porque somos fuertes juntos y nuestra comunidad no puede esperar más por cambios”, dijo Vargas. “También estoy caminando para representar a mis padres y familia quienes todos los días luchan para asegurarse que las familias tengan acceso a la igualdad”.
En esta protesta pacífica, se encontraba gente de todas las edades y género.
Claudia Coronel, estudiante de preparatoria, asistió por tercera vez a la protesta apoyando la equidad de género.
“Me gusta venir mucho a esto porque se me hace que sí podemos hacer la diferencia, y la gente debería de captar que solo queremos igualdad”, dijo Coronel. “Soy feminista y no significa que quiero ser mejor que los hombres, significa que quiero ser igual que ellos”.
Entre la multitud, se podía leer carteles con frases como, “Mujeres solo quieren tener derechos fundamentales”, “Los derechos de las mujeres son derechos humanos”, “No seremos calladas” y “Deja florecer la igualdad”.
“Yo he hecho estas cosas desde chiquita”, dijo Jocelyn Bernal, estudiante de UC San Diego. “Mi mamá nos ha llevado a marchas y a protestas. Aprendí de ella que muchas personas no tienen una voz, como los inmigrantes, y yo tengo el privilegio de estar aquí”.
Asimismo,mujeres aprovecharon para pedirle al presidente Donald Trump que deje de separar a familias y que llegue a un acuerdo con los demócratas.
“Mi papá fue deportado en febrero del año pasado”, dijo María del Consuelo Zacarías, quien trabaja para el Departamento de Finanzas del Zoológico de San Diego. “Todos los inmigrantes aquí son los que hacen la nación de EEUU”.
Zacarías dijo que la protesta ha sido su segunda marcha, y espera que con este tipo de protestas, se logre un cambio en el gobierno y para los grupos minoritarios.
La marcha duró alrededor de cuatro horas con discursos de agentes locales y ambiente familiar.
“Juntas somos más fuertes, juntas somos más fuertes”, la multitud gritaba con sus carteles en sus manos”.